El de la gorra era el Mustafá, al que llamamos el Moustachef.Bajábamos a las 10 de la mañana a desayunar a la plaza de la Kasbah y allí estaba él, con sus collares de madera que olían a romero ( pero no mucho) con sus barritas de incienso compradas en los chinos y que te las quería vender como incienso marroquí, sus camisetas de Xauen y de cualquier otra cosa.A veces nos daba la lata para que le comprásemos algo, pero una vez le libramos de dos collares de madera venía y se sentaba con nosotros a hablar.Decía que no se quería ir a España, que prefería quedarse en Marruecos porque allí no había trabajo y encima estábamos en crisis, y que él ya trabajaba bastante dando vueltas por Xauen y vendiendo collares de madera, camisetas de equipos de fútbol y barritas de incienso de los chinos.
Los otros personajes están extraídos de la serie de fotos " Walking Chefchauen", que las tomábamos mientras desayunábamos el té en las terrazas de los bares turisteros.
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