El arte oficial de la época recoge las influencias de su época, y en este caso se trata del Romanticismo en escultura, cuyos representantes paradigmáticos son los Rude y Carpeaux. Se trata de una exacerbación del movimiento barroco al estilo de Bernini, y sin asomarse apenas a las modulaciones volumétricas en pos de la luz de la escultura de Rodin. A la luz de la tarde, esas esculturas adquieren la cualidad épica que sin duda persiguieron sus creadores.
viernes, 28 de diciembre de 2018
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