Esta obra es un collage con tres elementos. La base es una impresión oleosa sobre papel, que realizaba para la creación de blocs de dibujo, uno de los retales que no había utilizado, así como la mancha roja de acuarela sobre papel texturado. Hice la impresión de un recorte de la obra de Ingres y, como en los métodos creativos del surrealismo y del dadaísmo, encima de la mesa de trabajo, la combinación de estos tres elementos me pareció que pareció que era digna de ser creada.
La imagen me trae a la memoria, curiosamente, una imagen muy poderosa de Edvard Munch, el pintor simbolista y expresionista , de 1894/1895, en dos versiones, una más monocroma y la otra mucho más colorida.
El espectácular y sensual cuadro de Ingres, del neoclasicismo francés,se presenta pensando también en la obra de Munch, más por el contenido que por la forma.
Durante 50 años, el pintor académico- romático francés estuvo retocando esta obra, de la cual nunca quedó satisfecho, por lo que se ve. Tampoco representó ningún escándalo por el desnudo y la pose sensual, al fin y al cabo se trata de una imagen que simboliza el nacimiento de los ríos y los manantiales, donde se reunían las musas de la mitología clásica greco-latina.
La imagen, en nuestros tiempos de corrección política, probablemente se censuraría como se censuró a Egon Schiele.
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